Mitos y conceptos errados sobre la constipación y el uso de laxantes

La aclaración de conceptos errados relacionados al estreñimiento es lo que nos detalla Stefan A. Müller-Lissner y otros médicos colaboradores de instituciones de salud destacadas de Alemania, Inglaterra, Italia y Estados Unidos en su estudio publicado el 2005 en la prestigiosa revista American Journal of Gastroenterology .

En este artículo los autores mencionan que hay muchas creencias fuertemente arraigadas referente a la constipación, pero que no tienen evidencias en las cuales basarse.

1. ¿ Existe relación entre la elongación del colon (largo del intestino) y el estreñimiento?

No existe. Müller-Lissner y colaboradores descartan que el dolicocolon, esto es, una elongación del colon sea causa de constipación y como consecuencia de esto declaran abandonados los procedimientos quirúrgicos destinados al acortamiento del colon con estos fines.

2. ¿ Existe riesgo de dependencia en el uso de laxantes ?

No existe riesgo.

Existen dos tipos de dependencia de drogas:

La dependencia física o adicción, que se define como “un estado de adaptación biológica del organismo que se manifiesta por la aparición de trastornos fisiológicos más o menos intensos cuando se suspende bruscamente su administración».

El segundo tipo de dependencia producido por algunas drogas, es la dependencia psíquica, cuya definición es la siguiente: «Condición en la que una droga produce sentimientos de satisfacción y un impulso emocional que requiere su administración periódica o continua para producir placer o evitar malestar». En la dependencia psíquica no se producen trastornos fisiológicos al suspender bruscamente el consumo. Sin embargo, el individuo siente la necesidad de tomarla.

Los autores de este trascendental artículo, consideran que una pequeña porción de los pacientes con constipación crónica es dependiente de los laxantes para lograr una actividad intestinal satisfactoria, pero que esto no es el resultado de la ingesta previa de laxantes. La dependencia, aseguran, es un proceso que implica la modificación de estructuras cerebrales, situación que no sucede con los laxantes debido a no se observa el paso a la sangre de los compuestos contenidos en el laxante, y en conclusión queda descartada la dependencia a laxantes debido a que no se ha determinado que exista paso de estos componentes al cerebro, que es donde las adicciones tienen lugar.

3. ¿ Se desarrolla tolerancia (necesidad de aumentar el consumo para lograr efecto ) con el uso de laxantes ?

No, solo pueden haber formación de hábitos de uso. Müller-Lissner y colaboradores afirman que la tolerancia a los laxantes estimulantes no es común y que no hay indicios de que ocurra una constipación de rebote después de detener la ingesta de laxantes, esto reafirma el hecho de que, a diferencia de lo que algunas personas con estreñimiento crónico piensan, no es necesario aumentar la dosis en el tiempo para mantener el mismo efecto . Finalmente señalan que aunque los laxantes pueden ser mal empleados, no hay potencial para la adicción.

Definición de Tolerancia, Abuso y Hábito:

• Tolerancia es la adaptación del organismo a los efectos de una droga que implica la necesidad de aumentar la dosis para seguir obteniendo resultados semejantes a los iniciales, lo que significa que el paciente debe aumentar a lo largo del tiempo de uso un medicamento para que éste continúe haciendo su efecto.

• En el abuso de medicamentos o de otras sustancias en general, el patrón de consumo de éstas no llega a reunir los criterios manifestados en la dependencia y que se expresan por consecuencias adversas significativas y recurrentes relacionadas con el consumo repetido de sustancias. Otro aspecto no menos importante es que el hecho que haya abuso de drogas no implica que se establezca, o se haya establecido una conducta de dependencia.

Hábito: Es la costumbre que se desarrolla en el consumo de medicamentos, bebidas u otros elementos ingeribles, sin la característica de crear dependencia física o psíquica, que conlleven a alteraciones en la personalidad del individuo que lo hagan depender del ejercicio del hábito en particular. Formación del hábito: el paciente estreñido considera que sus funciones intestinales las puede y las debe regular para su propia tranquilidad y mejor salud física, por lo que se dispone a un consumo constante que no necesariamente está asociado a una alteración permanente de sus propias potencialidades fisiológicas, en este caso, intestinales.

4. ¿Puede haber utointoxicación por acumulación de fecas?

No existen evidencias que puedan sostener la teoría que pueden surgir enfermedades por la vía de la autointoxicación que provocarían sustancias provenientes de las fecas y que hipotéticamente serían absorbidas por el colon. “No hay evidencias para sostener esta teoría mal concebida que ha sido abandonada ya hace mucho por la comunidad científica”.

5. ¿ Existe relación entre las variaciones hormonales de la menstruación y el estreñimiento ?

Afecta muy poco. Mediante la descripción de diversos estudios en los que se mide el tránsito intestinal en diferentes condiciones hormonales y durante el embarazo, los autores de este artículo aseguran que el rol de las hormonas sexuales como fuentes de alteración de la actividad intestinal durante el ciclo menstrual sería mínimo. También señalan que el hipotiroidismo puede ser causa de constipación pero entre los pacientes que presentan constipación el hipotiroidismo es muy raro.

6. ¿Existe relación entre embarazo (las variaciones hormonales) y el estreñimiento?

Sí existe. Durante el embarazo las hormonas jugarían un rol en el enlentecimiento del tránsito intestinal.

7. ¿ Cuál es la importancia real que tiene el consumo en la dieta de fibra en el estreñimiento ?

En personas estreñidas crónicas casi no tiene importancia. Según la opinión de estos expertos, una dieta pobre en fibra aunque puede tener una ingerencia menor, no debe ser asumida como la causa de constipación crónica: “algunos pacientes pueden ser ayudados por una dieta rica en fibra pero muchos pacientes con una constipación severa solo logran empeorar su condición cuando aumentan la ingesta de fibra en su dieta”.

8. ¿ Hay influencia de la ingesta de líquidos en el estreñimiento ?

No hay evidencias. Sorprendente resulta la afirmación que “No hay evidencias que la constipación pueda ser exitosamente tratada aumentando la ingesta de fluidos a menos que sea evidente la condición de deshidratación”. Señalan estudios donde en sujetos sanos se reduce la ingesta de agua de 2,5 litros diarios a menos de 0,5 litros y la frecuencia de deposiciones solo disminuyó en promedio de 6,9 ±0,9 a 4,9 ± 0,3 defecaciones /semana y el peso de las fecas disminuyó de 1,29 ± 0,20 a 0,94 ± 0,17 kilos/semana durante la restricción de fluidos. Encuestas realizadas en 883 personas mayores de 70 años no revelaron una asociación entre las cantidades estimadas de ingesta de fluidos y la constipación. Tampoco se encontró asociación de ambos parámetros en niños

9. ¿ Existiría relación entre la actividad física y el estreñimiento ?

Solo en ancianos. Müller-Lissner y colaboradores comentan que en la constipación presente en ancianos puede correlacionarse con una baja actividad física, pero muchos otros cofactores pueden estar contribuyendo del mismo modo; mencionan como importantes factores a considerar la dieta y la personalidad del paciente. En los jóvenes que sufren de constipación no se observan mejorías en la función intestinal como resultado del ejercicio. Los autores recomiendan como útil para la constipación en las personas mayores el desarrollo de actividades que incrementen la actividad física como parte de un programa mas amplio que considere otros aspectos para la rehabilitación.

10. ¿ Provocan daño intestinal (muscular o nervioso) los laxantes estimulantes ?

No. Müller-Lissner y colaboradores manifiestan también en forma muy enfática que es improbable que los laxantes del tipo estimulantes [por ejemplo Sen, componente de CIRUELAX®] en las dosis recomendadas sean dañinos para el colon. Se observa el desarrollo de melanosis coli ,que consiste en una decoloración del epitelio del colon. Esto ocurriría después de muchos meses de uso regular de laxantes y se revierte meses después de su discontinuación. Se señala que la melanosis coli no tendría ningún significado funcional. Por otra parte, la creencia tan arraigada que los laxantes estimulantes provocarían daño de los nervios intestinales tampoco tiene respaldo científico. Mencionan un solo estudio donde se relaciona el uso de “aloe” como laxante y se examina la forma del tejido nervioso del colon, el que no aporta datos que puedan sostener la hipótesis de daño neurointestinal como resultado de la acción de antraquinonas sobre las capas superficiales del colon a las que se accede a través de biopsias.

Entrevista imaginaria a los autores de un interesante artículo publicado en Am J Gastroenterol 2005;100:232–242.