OZONOTERAPIA, EL ESLABÓN QUE UNE A LA ALOPATÍA Y LA HOMEOPATÍA

Es conocido por todos que la alopatía básicamente consiste en el tratamiento de síntomas y con la única excepción de los antibióticos, el armario terapéutico alopático está orientado a modular aquellas respuestas inducidas por cambios fisiopatológicos asociados a las alteraciones en la salud o enfermedades. Por ejemplo, el tratamiento de la hipertensión, no se encarga de reducir las causas de las alzas de la presión arterial, sino que induce reducción en la actividad sistólica o induce una acción vasodilatadora periférica, provocando así, una acción reductora de la resistencia periférica y disminuyendo la presión diastólica.

Otro ejemplo podría ser en el tratamiento de las cefaleas: si es suave bastará un paracetamol o un ibuprofeno, mas acentuado se usará una combinación de paracetamol con cafeína, etcétera; una migraña puede requerir usar derivados de triptanes, y así, pero todos están orientados a silenciar el dolor y no pocas veces las causas del dolor de cabeza pueden provenir de estrés sicológico, fluctuaciones de la presión arterial o bien malestares gástricos; en todos estos casos, nuevamente se está atacando a los síntomas (dolor de cabeza) y no a sus causas.

Por otra parte, la Homeopatía utiliza en su armario terapéutico, recursos medicamentosos que imitan en sus respuestas aquellas observadas en la enfermedad o alteración de la salud. Así por ejemplo, en el tratamiento de la rinitis alérgica, se utilizan bajas dosis de histamina (histaminum), que es precisamente el mediador químico que se libera cuando experimentamos por ejemplo una reacción a un medicamento, o a una picadura de insecto o bien por exposición al polen medioambiental. La homeopatía básicamente sostiene que lo similar cura a lo similar y es por eso que sus recursos terapéuticos buscarán provocar respuestas del organismo a pequeñas dosis de aquellas sustancias que en dosis mayores provocan la sintomatología asociada a una determinada patología o enfermedad. En oposición a la alopatía, donde reina la relación que a mayor dosis, mayor respuesta, la homeopatía es todo lo inverso, y se usan dosis muy diluidas del principio activo, de manera de gatillar respuestas defensivas del organismo.

En la Ozonoterapia hallamos los dos mundos, la alopatía y la homeopatía.
Es conocido el hecho que la ozonoterapia es la administración de cantidades graduadas de gas de ozono, que se genera a partir de oxígeno, sometido a descargas eléctricas de 5.000 a 15.000 volts y se administra como ozono médico, combinado con oxígeno.
El ozono puede ser administrado de modo subcutáneo, terapia rectal, vía ótica, vía sistémica, por autohemotransfusión, y muchas otras formas.
El ozono en agua ozonizada se utiliza para lavar heridas y úlceras, colutorios en la periodontitis, lavado de úlceras estomacales etc. El ozono tiene un gran poder antibacteriano y antiviral y en esta condición estaría actuando entonces como un medicamento alopático y tiene un mundo de aplicaciones como germicida y en el área dermatológica y en la desinfección.
Cuando la ozonoterapia se indica para patologías isquémico-metabólicas, trastornos neurovasculares, insuficiencia venosa, úlceras de diabéticos, trastornos autoinmunes, vasculopatías periféricas, etc., el lugar común de estas patologías es el estrés oxidativo y el daño que conlleva este desequilibrio en el organismo.

En esta situación, cuando se administran bajas dosis de ozono, lo que se está gatillando es a aquellos componentes de nuestro GENOMA (material genético, cromosomas) que están encargados de la producción de sistemas de defensa del organismo, en especial de aquellas enzimas que nos defienden en contra del estrés oxidativo: superóxido dismutasa, glutatión peroxidasa, catalasa, En este caso tenemos que una inducción reducida de estrés oxidativo, esto es un desbalance entre la producción y eliminación de especies radicalarias, lleva a las células de nuestro organismo a una respuesta que conducirá a responder de manera sistémica contra una situación generalizada de estrés oxidativo, reduciendo entonces los agentes pro oxidantes que dañan de modo muy importante los tejidos y alteran las funciones celulares y de órganos. Tenemos entonces en este uso terapéutico una aplicación de la ozonoterapia que corresponde también a lo similar cura a lo similar o «similia similibus curandur», que inspiró a Samuel Hahnemann

Referencia:
Is ozone pre-conditioning effect linked to Nrf2/EpRE activation pathway in vivo? A preliminary result
Lamberto Re, Gregorio Martínez-Sánchez , Marica Bordicchia , Giuseppe Malcangi, Antonella Pocognoli , Miguel Angel Morales-Segura , John Rothchild, Armando Rojas

European Journal of Pharmacology 742 (2014) 158–162